La lucida y anecdótica reseña de la boda de los burros Ramón y Niña, ayer en el Zoológico Dominicano, arquitecto Manuel Valverde Podestá, implica mucho más que la risa, el asombro y los comentarios variados que rodaron por la Zona Infantil del ZooDom.
Al unir en “matrimonio” a estos dos burritos, las autoridades del Zoológico, en realidad han querido llamar la atención sobre la existencia de la especie en el mundo y el valor cultural que tiene el burro en el marco del perfil nacional.
La directora del Zoológico, doctora Patricia Toribio, manifestó que en el fondo, inquietud conservacionista y un llamado a sensibilizar la gente sobre esta inteligente y laboriosa especie, en peligro de desaparecer en continentes como Europa y Africa y con muy contados ejemplares en la República Dominicana.
Boda llamativa
La boda de los dos ayer en el Zoológico Dominicano, Ramón y Niña, fueron un hecho cuidadosamente planificado. El entrenador el ZooDom, Luis Artiles, los trató previamente para que hicieran la marcha nupcial, al tono de “Mi Burrito Sabanero”.
La Primera Dama
La Primera Dama, doctora Margarta Cedeño, dijo que quiso contribuir con el propósito conservacionista de la boda.
“En el marco de nuesta campana de valores, figura el amor y la protección del medio ambiente y las especies que la conforman” afirmó la doctora Cedeño de Fernández, quien llegó junto a su hija Yolanda América, invitadas como testigos de la boda.
Alerta
El doctor Adrell Nuñez resaltó sobre la escasa población de Equss asinus, (el nombre científico de la especie), de la que se supone que actualmente no quedan más de mil, ejemplares.
Niña y Ramón, contrajeron matrimonio ante la licenciada Adelis Flores, quien hizo el ritual de la unión legal, incluyendo la pregunta sobre si “algún burro se oponía a la unión¨, sin obtener respuesta de ningún equino presente.
Un equipo de entrenadores bañaron a la pareja y les pusieron un velo a Niña y un corbatín de frac a Ramón, poco antes de que una multitud de niños y adultos, les acompañara en su desfile nupcial ante la magistrada Flores, en un escenario decorado con globos rojos y blancos y el tema “Mi burrito Sabanero” de fondo retumbando en todo el pabellón infantil de la Dirección General de Ganadería en el año 2004, en toda la Isla Hispaniola (Haití y República Dominicana) sólo quedaban 532 ejemplares.
La zona infantil del Zoológico Dominicano fue escenario en la tarde de este domingo para esta boda insual.
La costumbre campesina de cruzar burras con caballos, para obtener el mulo puede ser muy beneficiosa porque éste último es más grande y fuerte, pero es infértil, no se reproduce. Detalló que el burro es una especie traída por los españoles en la época de la colonización.
El burro Ramón tuvo varios intentos de consumar la luna de miel , por lo que hubo que mantenerlos un poco separados.
Los burros
Su nombre científico es Equss asinus. Es un animal de gran fuerza e inteligencia, pese a lo cual se llama “burro” a personas poco diestras. Su embarazo se produce uno cada 2 años. Su gestación dura entre once y doce meses. Llega a vivir entre 15 y 25 años. Es herbívoro, ya que se alimenta principalmente de materia vegetal. Son dóciles, de gran capacidad de aguante. Es parte del perfil del campo dominicano. Es una especie que debe ser cuidada.
